
El álbum que será lanzado el viernes fue producido en la pandemia y representó todo un reto por el cierre de fronteras.
“Íbamos esquivando los problemas aduaneros y los problemas que planteaban los distintos gobiernos”, dijo Bunbury el jueves en conferencia de prensa. “Esquivando las bombas y grabando el disco”.
Es por esto que el álbum tiene un lado muy mexicano, pues tras ser grabado en el verano (boreal) España fue mezclado en los Honky Tonk Studios, a las afueras de la Ciudad de México. De hecho, al final de “El día de mañana” se escucha entre ladridos y voces a un organillero, un sonido característico de la ciudad.
“Tuvimos un problema. En Estados Unidos no podía entrar Jordi Mora, el ingeniero”, dijo Bunbury. “Estuvimos en la Ciudad de México mezclando súper a gusto y muy felices”.

“Si no sintiéramos eso estaríamos muertos”, dijo el jueves en conferencia de prensa.
Alborán, quien el miércoles presentó algunas de las canciones de su quinto álbum en un streaming en vivo desde la azotea de la Torre Picasso de Madrid (disponible en YouTube), dijo que el no saber si saldría a la luz el disco le facilitó componer como no le había pasado en mucho tiempo.
“Es la primera vez que hago un disco sin pensar que iba a hacer un disco”, dijo. “Intenté soltar todos los amarres porque lo único que me preocupaba era que mis padres tuvieran salud, que mis hermanos estuvieran bien y que mi abuela estuviera bien”.
Ante la pandemia decidió componer y producir con la aprobación de sus músicos y el productor Julio Reyes Copello, con quien Alborán ha colaborado en otros de sus álbumes. Pero no presentó su proyecto a su compañía discográfica sino hasta que estuvo terminado.

1. “I Just Wanna Live” de Keedron Bryant: En los momentos convulsos y de agitación la gente responde de maneras diferentes. Algunos protestan, otros lloran, algunos cantan. Tras la horrible muerte de George Floyd, Johnnetta Bryant recurrió a Dios y pidió una oración — así nació la letra de “I Just Wanna Live”. Le pidió a su hijo Keedron Bryant, entonces de 12 años, que cantara la canción, y el restó es historia. La poderosa interpretación de Bryant sobre ser un joven negro en el mundo de hoy se volvió viral, y todos, de Barack Obama a LeBron James, elogiaron al joven y a su familia por su fortaleza y su mensaje positivo. El tema no sólo ayudó a Bryant a obtener un contrato para un álbum, sino que ayudó al mundo a sanar en un momento en que la música es un lenguaje que nos une a todos.
2. “Do It” de Chloe x Halle: Chloe x Halle nos llevaron al club nocturno — alias la sala del hogar — en un año de pandemia en que necesitamos desesperadamente una canción bailable épica que nos ayudara a sobrepasar el día.

“El tema de la dirección siempre me gustó muchísimo, y como era una canción muy personal y el video también, quería que fuera así”, dijo la artista en una entrevista reciente por videollamada desde Buenos Aires. “Siempre estoy muy metida, soy bastante intensa con mi trabajo, con cada cosa que se va haciendo”.
La cantante dijo que también le “encantaría” llegar a dirigir un cortometraje o una película y señaló que entiende a los directores perfectamente, pues ella ha hecho televisión desde muy pequeña. Además, sus papás son directores y productores, por lo que ya lo trae de familia.
“Si lo hago quiero hacerlo también como muy metida en eso y no hacerlo al pasar, pero siento que me encantaría poder vivir ese tipo de cosas”, dijo. “Disfruto de todo ese lado de la producción, de la creación de un show, de un video, de todo el momento creativo. Es una de las cosas que más me apasionan”.
En el video, que codirigió con Diego Peskins, Tini aparece cantando en una habitación hermosamente decorada con tonos pastel donde un ramo de rosas vuelve a florecer hasta que el cuarto se llena de todo tipo de flores brillantes. Tini pasa de sentirse vacía, sola y triste a finalmente renacer, salir adelante y reencontrarse a ella misma.
“Las baladas duran para toda la vida en uno porque te acompañan en un momento y creo que ‘Te olvidaré’ tiene ese espíritu de decir, ¿quién no pasó por esto que yo estoy contando?”, dijo Tini, quien el pasado mayo, en medio de la pandemia, confirmó el fin de su sonada relación amorosa con el cantante colombiano Sebastián Yatra.
En un año que se sintió a menudo como una producción apocalíptica hollywoodense, las películas — con todo y que fueron relegadas a la pantalla chica — siguieron siendo tan necesarias como siempre. Fue el año del autocine, de las proyecciones en el jardín, de los servicios de streaming. Sea donde sea que se hayan visto, las mejores películas del año ofrecieron algo de escape y conexión: la posibilidad de gracia, una chispa de furia. y algo que el resto del mundo no podía ofrecer: la certeza de un final.
A continuación nuestras películas favoritas del 2020:
JAKE COYLE
1. “First Cow”: Cualquier dulzura de la vida en la radiante fábula fronteriza de Kelly Reichardt es tanto fugaz como eterna. Desarrollada en el territorio de Oregon en la década de 1820, es el retrato de una amistad creada, como debe ser, con amabilidad y productos horneados. El duro paisaje del oeste donde se encuentran dos pobres viajeros (interpretados por John Magaro y Orion Lee) sugiere una crítica al capitalismo como el drama sobre la economía moderna de Ken Loach “Sorry We Missed You”. Pero la ternura entre ellos, a pesar de todos, difícilmente podría sentirse más adecuada para los tiempos.