
“Para nosotros no había virus. Sólo oíamos que estaba en Harare o en otros pueblos, o cuando la gente de ciudad moría y los enterrábamos aquí”, dijo hace poco, refiriéndose a la costumbre en Zimbabue de enterrar a los emigrantes que se mudaron a la ciudad en los poblados de los que procedía su familia.
Eso está cambiando ahora. Un nuevo repunte del virus se adentra ahora por las zonas rurales africanas, donde vive la mayoría de la gente del continente, y llega a zonas antes consideradas como refugios seguros ante un virus que golpeó especialmente a las ciudades.
Las instalaciones en el campo están poco preparadas para hacer frente al coronavirus, y los vecinos como Bvukura temen que las próximas tumbas en excavar sean para sus vecinos o para ellos mismos.
Su poblado, Zvimba, a 110 kilómetros (68 millas) de Harare, aún no ha registrado un gran aumento de los contagios, pero está en una provincia que es el epicentro del brote.
“Ahora está a nuestras puertas. Da miedo. No sabemos cómo protegernos. Nunca hemos tenido un problema así antes”, dijo.
Como muchos en la región, ella no llevaba mascarilla ni estaba vacunada todavía.
África ha registrado más de 5,3 millones de casos y sufre su peor ola de infecciones hasta ahora, impulsada por variantes más letales y contagiosas. El continente reportó un aumento del 39% en casos en la semana entre el 14 y el 20 de junio, según la Organización Mundial de la Salud.

El secretario de Educación de Estados Unidos Miguel Cardona hizo el anuncio el lunes durante una visita oficial de tres días a Puerto Rico, la primera vez que un miembro del gabinete del presidente Joe Biden visita la isla. Es la primera ocasión en que la isla tiene acceso completo a estos fondos.
“Los estudiantes de Puerto Rico ya han sufrido suficiente”, comentó. “Es hora de regresar rápida y seguramente a la escuela”.
Aproximadamente la mitad de los 4.000 millones de dólares serán liberados como parte de la ley del Plan de Rescate Estadounidense, que fue aprobada en marzo para ayudar a compensar el impacto de la pandemia en la economía y salud pública.
Puerto Rico reabrió decenas de escuelas públicas y privadas en marzo por primera vez desde que inició la pandemia, aunque menos de un centenar de las más de 850 escuelas públicas de la isla fueron autorizadas para hacerlo. En ese momento, sólo los estudiantes de preescolar y educación especial, así como de los grados de tercero, segundo y tercero de primaria, y el último de secundaria pudieron regresar a las clases presenciales dos veces por semana. Un mes después, funcionarios cerraron todas las escuelas por un aumento en casos de COVID-19 y no las volvieron a abrir hasta mayo.

En videoconferencia con el presidente chino Xi Jinping, el mandatario ruso Vladimir Putin declaró que el tratado firmado en julio de 2001 en Moscú ha llevado a las relaciones entre los dos países a “alturas sin precedente” y será prorrogado por otros cinco años.
La coordinación entre Rusia y China en el ámbito internacional “ha desempeñado un papel estabilizador en los asuntos globales”, expresó el presidente ruso.
Por su parte, Xi destacó la importancia de una “cooperación estratégica” entre Moscú y Beijing para defender sus intereses comunes en el ámbito internacional. Agregó que los dos países están defendiendo “un verdadero multilateralismo y la justicia global”.
Putin y Xi han desarrollado una buena relación personal al tiempo que han impulsado una “alianza estratégica” entre sus dos países, en momentos en que aumenta la competencia con el Occidente por una mayor influencia en los asuntos mundiales. Si bien tradicionalmente Rusia y China han desestimado forjar una alianza militar, el año pasado Putin declaró que eso no se puede descartar del todo.
En la llamada del lunes, Putin felicitó a Xi por el centenario del Partido Comunista Chino, afirmando que China ha alcanzado “nuevos logros en el desarrollo socioeconómico del país” y recordando el apoyo soviético a los comunistas chinos.
Rusia conmemoró el centenario compartiendo con China documentos históricos sobre la antigua alianza soviética-china.

La líder del ultraderechista Agrupación Nacional, Marine Le Pen, reconoció que el partido opuesto a la inmigración no obtuvo una sola victoria en las 12 regiones de Francia continental. De inmediato se enfocó en las elecciones presidenciales del próximo año, señalando que “más que nunca parecen ser los comicios que permitan cambios de políticas y de políticos”.
Le Pen se quejó de que la organización de las dos rondas electorales en fines de semana consecutivos fue “desastrosa y errática”. De cualquier forma, los resultados de Agrupación Nacional en la jornada decisiva del domingo dejan entrever que el partido sigue siendo un anatema para muchos electores. No alcanzó más del 20% de los votos a nivel nacional, de acuerdo con cálculos de la agencia encuestadora Ifop, colocándose detrás de la derecha convencional y de todos los candidatos verdes y de izquierda.
Llamó la atención que Agrupación Nacional también fue derrotado aplastantemente en el sudeste, la región en la que algunos pronosticaban tenía su mejor oportunidad de obtener una victoria en las elecciones para consejos regionales.
De la misma forma en que ocurrió en comicios nacionales y locales previos, los votantes dejaron de lado sus diferencias políticas para unirse y evitar que Agrupación Nacional logre avances.